viernes, 10 de junio de 2016

Qué hacer en Cali? La ciudad que te atrapa

Después de más de una semana en Pasto, esperando que liberaran las rutas, sin muchas expectativas, decidimos salir  e intentar llegar a Cali como fuera. Tomamos un bus a un pueblito cerca de Pasto para poder estar en la carretera e intentar hacer dedo, después de más de dos horas de espera, con el sol que nos partía la cabeza y después de haber caminado mas de 3 km con todas las mochilas a cuestas, nos frenó la primer camioneta, que solo iba hasta el siguiente pueblo, por supuesto que subimos igual. En la caja trasera de la camioneta, con la mejor vista panorámica, avanzamos aunque sea algunos 60 km.


Nos dejo en un pueblito típico de ruta de montaña, por donde eran muy pocos los autos que pasaban, una hora después de haber llegado, paso un bus que iba directo a Popayán, empezó pidiéndonos $30.000, al rato de regatear un poco lo terminamos pagando $ 20.000.
Llegamos a Popayán de noche, me puse en contacto con Damián, el chico que nos iba a hospedar por couchsurfing a nosotros dos, para ver si podíamos quedarnos los cuatro, sin dudarlo nos dijo que si.
Dormimos en la casa de Damian y a la mañana siguiente nos fuimos bien temprano a la terminal para ver si salían buses a Cali, lamentablemente llegamos, la cantidad de gente era incontable y aun no habían liberados las rutas. Mas de dos horas esperando hasta que por fin comenzaron a salir los buses, de Popayan a Cali lo más barato es de unos $18.000 colombianos..

Un viaje que tendría que haber sido de unas tres horas, termino demorando casi 6, con peleas de choferes de por medio y roturas de espejos por querer adelantarse, vaya a saber uno donde. Y esta odisea para llegar a Cali no termino acá, llegamos de noche, los chicos se tomaron un bus directo a Santa Marta, y nosotros necesitabamos un taxi para ir hasta el Hostal Casa Blanca, en el cual nos íbamos a quedar de voluntarios, después de pelear los precios conseguimos un taxi por un precio razonable, le mostramos la dirección y allá fuimos. A medida que nos acercábamos el taxista nos preguntaba si estaba bien la dirección, la zona era horrible, le decíamos que si, ya que la habíamos sacado del face del hostal. Llegamos a la dirección y no existía ningún hostal. El taxista muy amablemente busco en internet y resulto ser que la dirección que figuraba en face no era la correcta, sino la de la pagina web, habíamos ido exactamente para la otra punta. Por lo que se imaginaran, que el taxi nos salio el doble de lo que realmente tendríamos que haber pagado, mas de $20.000.
Después de todo, ya estábamos en Cali. En el Hostel Casa Blanca no recibieron Yolanda y Jaime, madre e hijo, excelentes personas con las que pasamos 8 días maravillosos.


Qué hacer en Cali?
Hay muchisimas cosas para hacer en esta hermosa ciudad, voy a describir solo los lugares que yo pude conocer.

Barrio San Antonio: a tan solo 20 minutos caminando desde el barrio Santa Mónica Residencial, donde estábamos haciendo el voluntariado, se encuentra este antiguo lugar, el barrio San Antonio, históricamente conocido por su arquitectura colonial, colorido, calles empinadas y muy turístico, con lugares donde comer, donde tomar deliciosos y aromáticos cafés, donde bailar salsa y donde perderse con caminatas de una tarde entera. La Iglesia de San Antonio, de tipo barroco, se encuentra en la cima de una gran loma, después de subir unos cuantos escalones, se llega a esta antigua iglesia, desde donde la vista panorámica de casi todo Cali es única. Fue construida en 1747, cuando se vio la necesidad de que los habitantes de la zona de la colina tuvieran su propia iglesia, evitando tener que viajar largas distancias hasta la iglesia matriz de San Pedro.


Iglesia de San Antonio
Muy cerca de aquí, separados por la Calle Quinta diría yo, se encuentra el centro, típico de ciudad grande, puestos en la calle vendiendo de todo, ropa económica y donde se puede visitar La Iglesia de la Merced, Iglesia de San Francisco, el Palacio Nacional, la Catedral, el Puente Ortiz (primer puente construido sobre el río Cali. La obra fue iniciada en 1842 y finalizada en octubre de 1845. Es un puente característico, con barandas moldeadas con bellas figuras y faroles) que cruza el Río Cali y la famosa Iglesia de la Ermita,  la cual en el terremoto en 1787 se destruyo por completo y de ella solo se conservó la imagen del Señor de la Caña. En 1942, se construyó la actual iglesia, la cual es uno de los referentes del paisaje arquitectónico de la Ciudad de Cali. Es una construcción gótica en miniatura inspirada en la Catedral de Ulm, Alemania.

Puente Ortiz

Iglesia de la Ermita
Paseo de Los Gatos: Un paseo obligado es la caminata costeando el Río Cali, en el camino encontraras diferentes esculturas de gatos que simbolizan distintas cosas. Se puede comenzar desde el Puente Ortiz hasta llegar al Gato Mayor (por así decirlo), llamado el Gato del Río, a nosotros nos dijeron, sigan caminando que van a encontrar el gato más grande, muchísimo más grande que todos estos, nos imaginamos una escultura de unos cuantos metros, pero no, no era para tanto, era más grande que el resto, pero el señor había exagerado bastante.



Cerro Tres Cruces: vamos o no vamos era nuestra pregunta, ya que diferentes personas nos habían comentado que era peligroso subir, que robaban en el camino. Después de pensarlo decidimos ir sin nada, solo lleve el celular escondido para poder sacar fotos desde arriba, más de una hora de ascenso, el último tramo sin un camino marcado, escalando por piedras, me encantó. Arriba no hay mucho, tiene 1480 msnm. y en su cima se encuentran el monumento de las tres cruces, una estación de policía y varias antenas de telecomunicaciones, pero la vista es increíble, se ve absolutamente toda la ciudad de Cali.


Si sos amante de los grandes shoppings,  no te podes perder el Centro Comercial Chipichape

Si sos de los que les gusta bailar, de los que llevan el ritmo en la sangre, no te podes ir de Cali sin bailar SALSA

Tradiciones en Cali:

*Festival de música del pacifico Petronio Álvarez, en Agosto se celebra la música del pacifico, que muestra las grandes influencias de los ritmos africanos introducidos en Colombia por los esclavos.

*Festival mundial de salsa, en Septiembre



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Hoy mi casa son dos mochilas y el mundo. Relato cada paso de mi viaje, intentando contagiar a quienes no se atreven a soñar.
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